CHEVRON

Chevron no tira cohetes con producción petrolera venezolana

La gigante petrolera Chevron evalúa las recientes flexibilizaciones de sanciones en Venezuela y su impacto a corto plazo en la producción de crudo.

En medio del cambiante panorama de las sanciones estadounidenses, Chevron, la colosal petrolera de EE.UU., proyecta un horizonte cauteloso para el crecimiento de la producción petrolera de Venezuela.

Con los ojos del mundo energético puestos en el levantamiento temporal de sanciones por parte de Estados Unidos, Patti Leigh, VP de Chevron, apuntó en una rueda de prensa que las expectativas deben ser mesuradas.

«Realmente no esperamos un impacto considerable en el corto plazo, dada la temporalidad de seis meses de la licencia», afirmó Leigh en el evento de Argus. Este período, según la ejecutiva, sería insuficiente para movilizar el capital necesario hacia la industria petrolera venezolana.

Anteriormente, Chevron había expresado que las licencias emitidas tienen un alcance más amplio que el beneficio directo a la compañía. «Las licencias favorecen a un espectro más amplio que nuestra operativa específica», destacó Mike Wirth, CEO de Chevron, subrayando la apertura que esto representa para otros actores internacionales en el país caribeño.

Actualmente, la producción de Chevron en Venezuela ha marcado un ascenso desde los 60.000 b/d a 130.000 b/d al inicio del año, con una proyección de incremento hasta los 150.000 b/d para finales de año, de acuerdo a lo reseñado por Reuters.

Las nuevas licencias generales emitidas por la OFAC reflejan un paso significativo en la política de EE.UU. hacia Venezuela, especialmente tras la firma de acuerdos parciales entre el régimen de Maduro y la Plataforma Unitaria. Esta flexibilización autoriza operaciones en los sectores petrolero, gasífero y de oro, una jugada que podría reconfigurar el tablero energético en la región.

Chevron, con su prudencia característica, se mantiene a la expectativa de cómo estas licencias podrán materializarse en una revitalización palpable de la industria petrolera venezolana y, con ella, de la economía del país.