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Alberto Fernández, presidente saliente de Argentina, recibió a Javier Milei, presidente electo, en la Quinta de Olivos. Foto cortesía.

Arranca la transición en Argentina: Milei y Fernández frente a frente

Arranca la Transición en Argentina: Milei y Fernández Frente a Frente

En un paso clave hacia el cambio de mando, Javier Milei visita la Quinta de Olivos para comenzar el traspaso presidencial con Alberto Fernández.

Desde las sombras de su ‘búnker’ en el Hotel Libertador, el recién electo presidente de Argentina, Javier Milei, se trasladó en su fiel vehículo particular hacia la emblemática Quinta de Olivos. Era un martes que amanecía con la promesa de cambio, con la primera luz del día marcando el inicio de una nueva era política en el país sudamericano. Acompañado de su mano derecha, Nicolás Posse, Milei se presentó ante Alberto Fernández para poner en marcha un proceso de transición que se ha cocido a fuego lento y con expectativas que hieren el cielo.

La Casa Rosada, en un comunicado que destilaba formalidad y poco más, soltó la primicia: el encuentro se había cocinado «con el objeto de dar inicio al proceso de transición institucional entre los equipos designados por ambos». Aunque el lunes, día de descanso nacional, parecía la fecha ideal, fue el martes el escenario de este acto protocolario que marca el ritmo de lo que será el gobierno de Milei a partir del 10 de diciembre.

La victoria de Milei sobre Sergio Massa, que hasta hace poco manejaba las riendas de la economía argentina, fue clara y contundente. Con casi 14,5 millones de votos, el hombre de La Libertad Avanza se llevó el 55,69% del apoyo popular. Massa, por su parte, quedó rezagado con un 44,30% de los votos.

El pueblo argentino ha hablado, y lo ha hecho a gritos, pidiendo un cambio que parece tan radical como necesario.

Argentina, con una economía que baila al borde del abismo con una inflación que asusta, una pobreza que se siente en el alma y una brecha cambiaria que parece insalvable, mira con ansias y nerviosismo la primera sesión bursátil post-elecciones.

Milei, ese economista libertario que ha jugado con la idea de dolarizar la economía y desmantelar el Banco Central, tiene en sus manos más que el destino de un país: tiene la esperanza de millones que buscan un respiro y una salida al laberinto económico que hoy los atrapa.