Incidentes en el encuentro clasificatorio para el Mundial 2026 entre Venezuela y Perú llevan a Conmebol a emitir un comunicado condenando la violencia y discriminación.
En un escenario que no debería tener lugar en el deporte, la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) ha tenido que alzar la voz contra los lamentables sucesos ocurridos en el partido de eliminatorias del Mundial 2026. El encuentro entre Venezuela y Perú quedó manchado por actos de violencia por parte de funcionarios de la policía peruana y procedimientos discriminatorios hacia seguidores venezolanos.
«La CONMEBOL condena toda forma de violencia y cooperará siempre con acciones que apunten a desterrar la violencia, el racismo, la xenofobia y la discriminación», manifestó la entidad a través de un comunicado, subrayando su compromiso con la erradicación de estos actos que dañan al fútbol sudamericano y mundial.
Aunque la Conmebol ha expresado su disposición a trabajar en la eliminación de la intolerancia y la violencia en el deporte, dejó en claro que la responsabilidad de las sanciones recae en la FIFA. «La elaboración de las normas que rigen la clasificatoria, así como la decisión de abrir una investigación y la aplicación de eventuales sanciones, son atribuciones exclusivas de la FIFA», especificaron, marcando los límites de su jurisdicción en el asunto.
Este pronunciamiento no solo refleja la posición institucional de Conmebol frente a los hechos ocurridos, sino que también pone de relieve la necesidad de acciones contundentes y coordinadas para que el fútbol pueda ser verdaderamente un espacio de encuentro y respeto.