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Tribunal de apelaciones paraliza caso contra Trump por disputa de inmunidad

La jueza Tanya Chutkan tomó la decisión de suspender temporalmente el juicio contra el expresidente Trump debido a cuestiones de inmunidad presidencial.

La jueza Tanya Chutkan, perteneciente al Tribunal de Apelaciones del Circuito de Washington D.C., ha decidido suspender temporalmente el proceso judicial contra el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump. Esta pausa surge como resultado de una disputa sobre la inmunidad del empresario y político en el caso federal que investiga el supuesto intento de Trump de revertir el resultado de las elecciones de 2020.

Según reportes de The New York Times, la jueza Chutkan, quien está a cargo del caso, aclaró que esta medida no afecta la orden de silencio impuesta anteriormente a Trump. «Si se devuelve la competencia de este tribunal, este, de conformidad con su deber de garantizar un juicio rápido y justo para todas las partes, considerará si mantiene las fechas de los plazos, incluido el juicio previsto para el 4 de marzo», indicó la decisión.

Influencia de la Corte Suprema en el proceso

Paralelamente, la Corte Suprema ha acordado escuchar el caso de Joseph Fischer, lo que podría tener implicaciones significativas en los procesamientos contra quienes irrumpieron en el Capitolio el 6 de enero de 2021 y, por extensión, en el juicio de Trump. Esta decisión podría retrasar el juicio programado para marzo en Washington, y obstaculizar la investigación del fiscal especial Jack Smith.

Rechazo de inmunidad presidencial en caso de difamación

Adicionalmente, el tribunal de apelaciones de New York negó que Trump esté protegido por la inmunidad presidencial en una demanda por difamación presentada contra él por la escritora E. Jean Carroll. El tribunal consideró que Trump perdió la oportunidad de acogerse a la inmunidad al no invocarla en 2019.

Imputación a Trump y sus implicaciones

Donald Trump fue imputado el 1 de agosto de varios cargos penales por sus presuntos intentos de revertir su derrota en las elecciones presidenciales de 2020. Los cargos, que incluyen asociación delictuosa para defraudar al gobierno de EE. UU. y manipulación de testigos, se derivan de la investigación del fiscal especial Jack Smith.