El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, prevé despedir al general Valery Zaluzhny en medio de tensiones y desafíos militares.
En un giro significativo dentro de la estructura militar de Ucrania, el presidente Volodimir Zelenski le comunicó al general Valery Zaluzhny, su máximo comandante, que será despedido.
Este cambio, revelado en una reunión el lunes y confirmado por un alto cargo familiarizado con el hecho, se produce en un momento crítico para Ucrania, que enfrenta desafíos continuos en el campo de batalla y meses de fricciones entre el presidente y el popular general.
Zaluzhny, que sigue en su cargo por el momento, espera un decreto presidencial formal que confirmaría su destitución casi dos años después de la invasión rusa. Esta decisión llega cuando las fuerzas rusas parecen estar ganando la iniciativa estratégica en algunas partes del frente.
Serhiy Nykyforov, portavoz de Zelenski, negó inicialmente que Zaluzhny hubiera sido despedido. “No hay ningún tema de conversación”, dijo a los periodistas, añadiendo que no existía ninguna orden de destitución.
Sin embargo, fuentes anónimas indican a The Washington Post que las diferencias entre Zelenski y Zaluzhny se han agudizado, particularmente en relación con el número de soldados que Ucrania necesita movilizar. Zaluzhny propuso movilizar cerca de 500.000 soldados, una cifra que Zelensky consideró poco práctica dada la escasez de recursos y los posibles problemas de reclutamiento.
A pesar de esto, Zaluzhny argumentó que Ucrania necesita aumentar sus fuerzas para igualar la movilización de 400.000 nuevos soldados por parte de Rusia.
Entre los posibles sucesores de Zaluzhny se mencionan al jefe de la inteligencia militar ucraniana, el teniente general Kyrylo Budanov, y al general Oleksandr Syrsky, comandante de las fuerzas terrestres ucranianas. Ambos representarían un cambio en las tácticas militares de Ucrania.
Este desarrollo revela tensiones internas en Ucrania y posibles discrepancias en la estrategia militar y política del país en un momento crucial de la guerra. La popularidad de Zaluzhny, que rivaliza con la de Zelenski, también plantea preguntas sobre las dinámicas políticas internas y el futuro del liderazgo ucraniano.
La ayuda internacional para Ucrania también ha sido un punto de discordia, con Zaluzhny señalando diferencias entre las necesidades militares y lo que los líderes políticos han podido obtener de aliados y socios.
Este cambio en el liderazgo militar de Ucrania podría tener implicaciones significativas para la guerra en curso y la seguridad del país.
(Con información de The Washington Post)