La confrontación entre Joe Biden y Donald Trump adquiere nuevos matices con declaraciones polémicas y una crítica abierta hacia la violencia política.
En un discurso que marcó el tercer aniversario de la insurrección del 6 de enero, el presidente Joe Biden no solo recordó el evento con solemnidad, sino que también aprovechó la ocasión para lanzar duras críticas contra Donald Trump y sus seguidores, acusándolos de encontrar diversión en la violencia política.
«En su mitin, él bromea sobre un intruso, impulsado por la Gran Mentira de Trump, tomando un martillo contra el cráneo de Paul Pelosi», expresó Biden, reflejando su indignación hacia la ligereza con que Trump aborda temas de violencia.
Más allá de las cámaras, Biden se ha mostrado aún más directo en sus opiniones sobre Trump, según informes de POLITICO, describiéndolo con términos profanos entre sus círculos más cercanos, según fuentes anónimas reveladas a la publicación estadounidense.
Estas declaraciones ponen de manifiesto no solo una profunda aversión personal sino también una preocupación genuina por los efectos de la retórica de Trump en la cohesión social y democrática del país.
La campaña de Trump, por su parte, no tardó en responder, tachando a Biden de irrespetuoso tanto en lo público como en lo privado, y criticando sus políticas como fallidas.
Este intercambio de acusaciones subraya la polarización y el antagonismo que siguen marcando el panorama político estadounidense.
El ataque contra Paul Pelosi, marido de la ex Presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi, perpetrado por un hombre radicalizado por teorías conspirativas de derecha, se convierte en punto de discordia.
Trump, lejos de mostrar empatía, ha utilizado el incidente como material de burla en sus mitines, provocando la furia de Biden, quien ve en estas actitudes una amenaza directa a los valores democráticos y una falta de respeto hacia las víctimas de violencia política.
Las críticas de Biden hacia Trump no se limitan a este evento. La gestión de Trump del asalto al Capitolio el 6 de enero, su ambigua postura sobre los enfrentamientos racistas en Charlottesville, y su relación con figuras autoritarias como Vladimir Putin, también han sido motivo de censura por parte del presidente, quien en diversas ocasiones ha manifestado su reprobación a través de fuertes palabras.
Biden tiene fama de usar un lenguaje picante tras bastidores. Sobre Trump, habría dicho, de acuerdo a los reportes de POLITICO, que es un “enfermo imbécil” y un “imbécil”.