Tsakhia Elbegdor dijo que el Imperio Mongol alguna vez fue el más grande del mundo cubriendo gran parte de Eurasia e incluyendo la actual China y gran parte de Rusia, así como Ucrania.
Tsakhia Elbegdorj, presidente de Mongolia entre 2009 y 2017, se burló del dictador ruso Vladimir Putin y de su enfoque en la historia para intentar justificar su invasión de Ucrania.
Putin ha utilizado con frecuencia fronteras históricas para justificar su brutal invasión, argumentando que Rusia tiene derechos sobre Ucrania a pesar de que Ucrania es un país independiente.
En su entrevista con Tucker Carlson la semana pasada, Putin describió siglos de historia rusa y europea para justificar su invasión. Los historiadores dicen que gran parte de la historia que él contó no se sostiene, según 24noticias.org.
Elbegdorj compartió mapas que mostraban cuán grande solía ser el Imperio mongol y el hecho de que en algún momento controló partes de lo que hoy es Rusia.
“Después de la charla de Putin encontré un mapa histórico de Mongolia. No te preocupes. Somos una nación pacífica y libre”, escribió Elbegdorj. Los mapas que compartió también mostraban cuán pequeña era Rusia en el siglo XV.
El Imperio Mongol alguna vez fue el más grande del mundo. Su territorio cubría gran parte de Eurasia e incluía la actual China y gran parte de Rusia, así como Ucrania.
Hoy en día, Mongolia, situada entre China y Rusia, es un país más pequeño, pero sigue siendo una de las naciones más grandes del mundo en términos de superficie terrestre total.
El actual gobierno de Mongolia no ha apoyado la invasión rusa de Ucrania, aunque tampoco la ha condenado rotundamente.
Pero Elbegdorj ha expresado abiertamente su apoyo a Ucrania.
Escribió en febrero de 2023 que «las democracias del mundo deben unirse con mayor determinación para declarar que la libertad no es negociable y darle a Ucrania las armas que necesita para ganar».
«Sé que Putin no tolera la libertad», añadió. «Me he sentado con él en muchas ocasiones. Desprecia las diferencias y la competencia. Teme una Ucrania libre. Como es un narcisista profundo, no podía permitirse el lujo de ver vecinos más exitosos y prósperos».