ZAPORIYIA

Escalada de tensión: Ucrania niega implicación en ataque a central nuclear de Zaporiyia

En medio de acusaciones cruzadas, Ucrania se desliga de los ataques con drones en la ZNPP, mientras las tensiones escalan por la seguridad radiológica y las repercusiones internacionales.

En un nuevo capítulo del conflicto que agita al este de Europa, las autoridades ucranianas han rechazado categóricamente cualquier responsabilidad en los recientes ataques con drones contra la central nuclear de Zaporiyia (ZNPP), situada en una región de Ucrania actualmente ocupada por fuerzas rusas. Este desmentido llega en un momento de alta tensión, con la comunidad internacional observando con preocupación los desarrollos en el terreno.

«Ucrania no está involucrada en ninguna provocación en el territorio de la ZNPP temporalmente ocupado», afirmó el Centro de Comunicación Estratégica y Seguridad de la Información de Ucrania, enfatizando su compromiso con la seguridad radiológica por encima de todo. Esta posición se contrapone a las acusaciones rusas, que atribuyen a Ucrania la autoría del ataque mediante drones «autoexplosivos».

La central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa, sufrió tres impactos directos durante los ataques, causando al menos una víctima, según reportes del Organismo Internacional de Energía Atómica. Estos incidentes han elevado el temor a un posible desastre radiológico, añadiendo una capa de complejidad al ya de por sí complicado escenario bélico.

«La ZNPP está siempre al borde de un desastre provocado por el hombre debido a los golpes provocadores de Rusia y a una gestión ilegal y negligente», señaló el comunicado ucraniano, acusando a Moscú de utilizar la situación como una forma de «chantaje nuclear» tanto hacia Ucrania como hacia el resto del mundo.

Por su parte, el Kremlin ha reaccionado con desdén a las negativas ucranianas, considerando los ataques como una «provocación muy peligrosa» que amenaza con tener «muy malas consecuencias negativas». Dmitri Peskov, portavoz del Gobierno ruso, ha subrayado la gravedad de la situación, especialmente dada la presencia de personal del OIEA en las instalaciones durante los ataques.

Mientras tanto, la infraestructura crítica de Ucrania continúa siendo blanco de ataques, afectando no solo a la central nuclear de Zaporiyia sino también a otras instalaciones clave, exacerbando la crisis humanitaria y energética en la región.