URIBE

Álvaro Uribe será llamado a juicio: Una nueva fase en el caso de soborno de testigos

El expresidente colombiano enfrentará formalmente acusaciones por soborno de testigos y fraude procesal, marcando un capítulo controversial en la política colombiana.

Este martes, la justicia colombiana ha marcado un hito al presentar una acusación formal contra el expresidente Álvaro Uribe, por presuntos delitos de soborno de testigos en actuación penal y fraude procesal. La Fiscalía de Colombia ha decidido llevar a Uribe a juicio tras desechar dos solicitudes de preclusión, abriendo así una ventana hacia un proceso que captura no solo la atención del país sino de observadores internacionales.

El comunicado de la Fiscalía, compartido en X, esclarece que tras el proceso de reparto judicial, se fijará la fecha y hora para la audiencia de formalización de la acusación, garantizando el derecho al debido proceso para todas las partes involucradas. Este anuncio no solo pone a Uribe bajo el escrutinio de la justicia, sino que también reabre debates sobre la integridad y la transparencia en el ámbito político colombiano.

El caso contra Uribe se origina en una demanda que él mismo presentó en 2012 contra el senador Iván Cepeda, acusándolo de manipular testigos contra él. Sin embargo, la mesa se volvió cuando la Corte Suprema de Justicia decidió exonerar a Cepeda y abrir una investigación contra Uribe por el mismo delito de soborno de testigos. Este giro dramático resalta la complejidad y la polarización de la política colombiana.

Los testigos implicados, presos en las cárceles de Palmira y La Picota, así como una tercera persona identificada como Eurídice Cortés, son señalados de haber sido sobornados para favorecer con sus declaraciones al exmandatario. Este elemento añade una capa de gravedad y expectativa al desarrollo del juicio.

A pesar de la seriedad de la acusación, Uribe enfrentará el proceso en libertad, una decisión que la Fiscalía describe como usual, reservando la privación de la libertad para casos excepcionales. Este detalle subraya la delicadeza con la que se manejan los procedimientos judiciales en figuras de alto perfil en Colombia.