Niños, adultos o ancianos no se han salvado. Alergias, vómitos y diarreas tienen un denominador común: los pacientes manifestaron haber consumido la supuesta leche en polvo elaborada en México que es distribuida a través de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), dirigidos por el régimen de Nicolás Maduro.
El diario La Verdad informó recientemente que en el ambulatorio Alfredo Machado, en el estado Vargas, son atendidos diariamente un promedio de 55 pacientes con los síntomas ya descritos, que presentan intoxicaciones alimentarias.
“Le dio eso por la leche de los CLAP”, repiten, palabras más, palabras menos, las madres de los muchachos que suelen llegar casi descompensados, refieren médicos de ese centro asistencial.
Y es que quienes han consumido ese producto saben que ni parece, ni huele y mucho menos sabe a leche en polvo. Además, al ser mezclada con agua o café, la supuesta leche deja una especie de sedimento pastoso que se forma en el fondo de la taza, vaso o tetero del que se ingiere.
¿Es casualidad lo ocurrido en Vargas? Los hechos responden que no, a juzgar por los reportes que desde mediados del año pasado se generan desde Caracas, o desde los estados Carabobo, Aragua, Portuguesa o Delta Amacuro, entre otros, de pacientes que también presentaron alergias, vómitos y diarreas tras consumir la presunta leche de los CLAP.
Sobre estos casos también surgen otras interrogantes: ¿Qué riesgos acarrean a la salud de los venezolanos la ingesta de esta supuesta leche distribuida por los CLAP? ¿Su comercialización en el país es producto del “error” de un burócrata, o una política deliberada de suministrar productos sin valor nutricional a la población, como una estrategia más de la denominación de masas que se ejecuta en el país?
La bionalista Guiber Mijares Palacios (PhD), jefa de la Cátedra de Bioquímica “A” de la Escuela de Bioanálisis de la Facultad de Medicina de la Universidad Central de Venezuela (UCV) fue consultada por Zeta para que despejara esas incógnitas.
“Juegan con el hambre de la gente”
“Es una estafa, es un producto de mala calidad, es inaceptable”, responde la experta, al solicitarle que defina lo que es la presunta leche en polvo “Lacto Mas”, luego de ser sometida a un análisis de laboratorio para determinar qué es lo que realidad está tomando el venezolano, en particular, el que dispone de menos recursos.
“Me conmueve el hecho de que se subestime a la población, porque hay maneras, inclusive mediante metodologías experimentales sencillas, que demuestran la poca calidad de ese producto, y que aquí en nuestro país hay profesionales como nosotros capaces de dejarlo en evidencia… Es jugar con la ignorancia de la gente, con el hambre de la gente, con la salud de la gente, con la vida de la gente, lo cual es inaceptable”.
Para sustentar su aseveración, la bionalista Guiber Mijares narró que el resultado de las pruebas de laboratorio hechas con una muestra de “Lacto Mas”, arrojó que es un compuesto de degradación del almidón llamado dextrina, “y cuando se trata de una leche en polvo, como dice el empaque del producto, jamás debe contener dextrinas de almidón ni almidón, porque eso no forma parte de la leche (…) Las dextrinas de almidón no tienen ningún aporte nutricional”.
Los riesgos de consumir Lacto Mas
-¿Qué consecuencias le traen al organismo la ingesta de esos componentes detectados en “Lacto Mas”?
-Además de los cuadros diarreicos, hay personas que han descrito que han padecido algunos tipos de alergias, mientras que su uso prolongado en personas diabéticas pudiera ser riesgoso.
Guiber Mijares también destacó otro punto que llamó su atención, y es que el empaque de “Lacto Mas” señala que esa leche “está enriquecida con vitaminas y minerales en forma de sales, como el sulfato ferroso y carbonato de calcio, sin embargo, sabemos a nivel nutricional que algunos aportes o suplementos juntos son poco eficientes para su asimilación en el cuerpo”.
Agregó que la cantidad de sales que el producto dice contener pareciera ser superior a lo que normalmente se usa para la leche, “lo que puede traer como consecuencia diarreas osmóticas”, que son aquellas que se generan, básicamente, cuando se ingieren sustancias o nutrientes que retienen el agua en parte del intestino, excediendo la capacidad de absorción del colon.
-¿Qué otro riesgo para la salud implica el consumo prolongado de un producto como “Lacto Mas”?
-El hecho de que la población tenga un consumo reiterado de almidones o sus derivados que desplazan la asimilación de nutrientes, pudiera traer como consecuencia un incremento calórico pero pérdida de su capacidad nutricional.
El trasfondo de la actual
mala alimentación del venezolano
¿Es casual que al analizar el contenido de los productos que distribuye el régimen chavista a través de los CLAP, lo que se evidencia es la falta de proteínas y otros nutrientes primordiales para el ser humano? ¿Obedece a una política de los que actualmente dirigen el Estado, que desde hace más de dos años en los establecimientos oficiales como PDVAL y Mercal no vendan ni carne, ni huevos, ni pollos? ¿Esto es “guerra económica”? ¿Ineptitud? ¿Una deliberada política que persigue someter a los venezolanos mediante la mala alimentación?
La bionalista Guiber Mijares despejó esas dudas: “Esto es una forma de debilitar a la población por razones nutricionales, porque nosotros ya tenemos una debilitación psicoemocional y una debilitación económica. Si quieres tener a una población de escasa capacidad de pensar, con un sistema nervioso pobre, con un sistema inmunológico deficiente y de escasos reflejos, bríndales reiteradamente productos de este tipo. Lo lamentable es que este tipo de productos está orientado a una población de menores recursos y que al ver un empaque que dice ‘leche en polvo’, siente que por fin tiene algo para comer y lo va a ingerir sin discriminar en las consecuencias negativas que le va a traer (…) La gente se conforma con eso y no puede discriminar que es un producto nocivo para su salud, porque nutricionalmente es débil. Sus sinapsis neuronales no son muy eficientes y no se da cuenta que le están dando algo que más bien lo perjudica… esto es inaceptable por lo que implica la alimentación humana”.
¿»Qué es un “veneno”?
El diccionario de la Real Academia Española, en una de sus acepciones, describe esta palabra como “sustancia que, introducida en un ser vivo, es capaz de producir graves alteraciones funcionales e incluso la muerte”… ¿Son o no un “veneno” las supuestas “leches” como “Lacto Mas” que distribuye el régimen chavista a través de los CLAP?