Por JURATE ROSALES
Sinceramente, no logro entender por qué nos alientan a votar con lo que obviamente está lleno de obstáculos y trampas, salvo que si no se vota, será peor, porque se terminará de atornillar por mucho tiempo la situación actual. Así que a votar, y después veremos.
Por más que pienso, considero que este será el inicio – diríamos que el botón de arranque, – de futuros acontecimientos que ahora vendrán concatenados. Es que me parece, que un juego y sus protagonistas ya tuvo su punto final, se acabó, y ahora vienen otros jugadores cuyo tiempo para terminar la partida está contado. No imagino – desgraciadamente – a ninguno de los aspirantes que en 23 años no han logrado marcar ni siquiera un pacto de unión entre ellos, sin eufemismos ni egoísmos, capaces de darse la mano buscando una solución común. Si después de esta última prueba no logran unirse sin absurdos protagonismos, será que ninguno habrá merecido la confianza depositada en ellos conjuntamente. Si no han sido suficientes dos décadas de destrucción masiva de la economía, progreso, población de la que millones han huido, y educación que ha sido el último tramo en paralizarse, es que entonces, ningún político de la llamada oposición ha aprendido lo más elemental: unión sin ínfulas pueriles.
Por supuesto que hace falta madurez, y por el momento la veo en mucha gente, que añora los tiempos de la democracia en que todo progresaba y el país se convertía en el más moderno de América Latina. Curiosamente, la gente lo añora, pero es la gente, y no el lamentable espectáculo del pescueceo candidatural donde se cuentan los pollos antes de nacer.
Después de las anunciadas elecciones, donde todos tendremos que votar por candidatos que guste o no, serán de la MUD que es lo que importará por tratarse de un paso hacia adelante, habrá que enfrentar a la siguiente etapa, las elecciones presidenciales, donde por el momento, lo único que se ve, es un vacío de sinceros entendimientos. Ojalá aparezca otro Puntofijo.
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