En un cambio de tono, el mandatario argentino extiende una invitación formal al pontífice para visitar su país natal.
El presidente de Argentina, Javier Milei, extendió una invitación formal al papa Francisco para visitar su país de origen, en un esfuerzo por «traer frutos de pacificación y de hermanamiento de todos los argentinos». Esta invitación, que representa un cambio significativo en la postura previamente crítica de Milei hacia el pontífice, fue revelada este jueves a través de las redes sociales de la Oficina del Presidente.
En la carta, que fue fechada el pasado lunes por la Casa Rosada, Milei expresó su «alta consideración y respeto» por la obra y la persona del papa Francisco. Este reconocimiento contrasta con las declaraciones anteriores del mandatario, quien había calificado al papa como un «representante del maligno en la tierra» y un partidario de «las dictaduras sangrientas». Sin embargo, Milei ha lamentado sus comentarios pasados y ha agradecido al papa por sus «sabios consejos y sus deseos de coraje y sabiduría», que recibió en una conversación el pasado 22 de noviembre, días después de convertirse en el presidente electo de Argentina.
En su misiva, Milei destacó el potencial impacto positivo que una visita del papa podría tener en la unidad y fortaleza colectiva de Argentina, un país que actualmente enfrenta una situación económica crítica. El presidente argentino señaló la necesidad de adoptar medidas urgentes para evitar una catástrofe social y explicó las medidas económicas que ha propuesto para transformar la situación del país, enfocándose en la desregulación de la economía.
Reconociendo que estas decisiones «pueden profundizar inequidades», Milei solicitó la colaboración de la Iglesia católica en el campo social para mitigar posibles impactos negativos.
Jorge Mario Bergoglio, nacido en Buenos Aires en 1936, había sido invitado previamente a la asunción presidencial de Javier Milei el pasado 10 de diciembre, pero no pudo asistir. Los viajes oficiales del papa, quien cumplió 87 años en diciembre pasado y presenta una salud deteriorada, son cada vez menos frecuentes.
Esta invitación de Milei al papa Francisco simboliza un esfuerzo por fortalecer lazos y buscar orientación en un momento de desafíos significativos para Argentina, tanto en el ámbito económico como en el social. La respuesta del Vaticano y la posible visita del pontífice son anticipadas con interés, dada la influencia que podría tener en el panorama actual del país suramericano.