Por.- Alex Vallenilla / @alexvallenilla
-La caída de producción de combustible venezolano, podría afectar a unas 150 mil familias de ambos países que viven del contrabando en las fronteras
Los efectos de la crisis venezolana se reflejan en el mercado internacional de hidrocarburos, con alza del precio del petróleo y de la gasolina en diversos países. La pérdida de producción de petróleo por Pdvsa, por al menos un millón de barriles en los últimos meses ha servido para que la estrategia de reducción de producción petrolera de la OPEP, se cumpla en gran parte.
Colombia no escapa a esta situación luego de aumentar la gasolina a precios históricamente nunca vistos en ese país días atrás, luego que el litro del combustible se ubicara en 0,79 dólares en promedio con alzas fuertes en 15 de las principales ciudades. La tarifa más alta fue la de Bogotá, subiendo a 9.303 pesos colombianos el galón. En la población de Cúcuta se fijó el precio en 0,63 dólares o 6.996 pesos.
Mientras desde el lado venezolano, donde la gasolina cuesta 0,000003 dólares, la más cara, el contrabando hacia el vecino país comienza a sufrir las consecuencias del colapso de la industria de refinación, lo que ha generado escasez y racionamiento en las estaciones de servicio, sobre todo del occidente del país, a ello debe sumarse que Venezuela no puede importar nafta y solventes para producir gasolina a menos que realice los pagos de contado a sus principales proveedores que están en Estados Unidos.
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La merma de la producción venezolana es grande, según los últimos datos de la industria apenas se estarían produciendo unos 90 mil barriles diarios de los cuales se estima que más de la mitad se vaya por las fronteras producto del contrabando de combustibles que sufre la industria venezolana y que genera enormes pérdidas al país, lo que se traduce en un factor que agrega inflación que pagan los venezolanos en general.
El contrabando estimado en unos 60 mil barriles diarios, estaría generando pérdidas a Venezuela por el orden de 2,3 mil millones de dólares al año según los precios de los combustibles de Cúcuta y el resto del oriente colombiano. En esta actividad se encuentran involucradas alrededor de unas 150 mil familias en ambos lados de la frontera colombo-venezolana, lo que arrojaría ingresos de unos 15 mil dólares al año por familia en toda la región. La crisis venezolana amenaza con dejar desabastecido al país, sin combustible, lo que dejaría a la industria del contrabando sin su principal rubro, un cambio en la disposición de combustibles puede generar intensos conflictos sociales en los límites fronterizos por generar desempleo y distorsión en esas estructuras de negocios ilícitos.