“Nos hemos visto obligados a prescindir de Lopetegui”, anunció Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol en rueda de prensa desde Krasnodar, donde se encuentra concentrada la selección española. “Todo lo que ha ocurrido nos ha obligado a tomar esta decisión”.
“La situación es muy complicada, pero esta es la mejor de las soluciones, aseguró el directivo español, antes de explicar que “la selección es el equipo de todos los españoles, y no se pueden hacer las cosas de esta manera, no podemos pasar por alto cómo se han hecho las cosas”, remató Rubiales.
Luego, llegó el fichaje de Fernando Hierro como seleccionador, lo más lógico para que el terremoto no fuera a mayores.
“A mí me hubiera gustado que Rubiales hubiera actuado de otra manera“, dijo Lopetegui al ser presentado por el Madrid, antes de añadir: “La lealtad es decir la verdad. En cuanto hubo algo que decir, el primer o que lo sabe es él. Hay incluso una felicitación a través de una web. Yo quería dar una rueda de prensa ese mismo día, pero tengo que esperarle porque estaba lejos. El acuerdo se tenía que cerrar antes, no durante el Mundial. Lo que pasó en esas horas yo no lo sé. El motivo de sacarlo era ser transparentes. Yo como entrenador no quería ocultismos. Los jugadores lo supieron, no hubo problema, entrenaron magníficamente. Ese grupo de jugadores es magnífico, han pasado las de Caín, hemos tenido cuatro presidentes de la federación en estos años, pero con la fuerza de ese grupo volveremos a ser campeones del mundo”.
El presidente merengue, Florentino Pérez, en el ojo del huracán por su movida, se explicó en la presentación del nuevo entrenador de su equipo. “El Madrid y Julen habían alcanzado un acuerdo en el ejercicio de la libertad de ambas partes. Respetamos cláusulas y se haría efectivo después del Mundial. El objetivo de comunicarlo era una muestra de transparencia y normalidad para evitar rumores. No hay precedentes de que un acuerdo de trabajo para después de un Mundial se considere como una acto de deslealtad. Quienes mezclan eso tienen un sentido patrimonial de las personas felizmente superado en la España del siglo XXI”, apuntó el mandatario blanco. “Comuniqué al presidente de la Federación el acuerdo y respetando el contrato vigente. Lo que parecía un acto de normalidad, se convirtió en un absurdo acto de orgullo mal entendido. Es una decisión injusta. Hay gente que sólo busca desprestigiar la imagen del Real Madrid. Ha llegado el momento de que hagamos frente a todos los que intentan dañar la imagen de nuestro club, aunque vivamos una de las mejores épocas de nuestra historia“, aseguró.
En fin, aquí les dejamos la polémica en El Banquillo.