Elecciones en EEUU

Manual para seguir los resultados de las elecciones ‘midterm’ en Estados Unidos

Las midterm se interpretan por la política estadounidense como un pulso de cara a las presidenciales y, a su vez, como un referéndum de la gestión actual de Joe Biden quien afronta una caída en popularidad.

Por M. Redondo – El Confidencial

Estados Unidos está a punto de decidir el rumbo político del país durante los próximos años. Las elecciones de medio mandato de este martesen las que se está votando por el control del Congreso, se han convertido en un indicador de la tendencia que puede marcar el rumbo de las presidenciales de 2024.

Las encuestas predicen que los demócratas perderían el control de la Cámara de Representantes que ganaron en las midterm de 2018. La carrera para conquistar el Senado está un poco más disputada y, a pesar de que en las elecciones se vota solamente para cambiar 25 de los 100 asientos, los demócratas controlan la Cámara Baja por un margen tan estrecho que puede ser fácilmente revertido.

Las midterm se interpretan por la política estadounidense como un pulso de cara a las presidenciales y, a su vez, como un referéndum de la gestión actual. Joe Biden afronta una caída en el índice de popularidad por la alta inflación en Estados Unidos y la pérdida de poder adquisitivo. El fenómeno, acrecentado por la guerra de Ucrania, ha afectado sobre todo a la cesta de la compra y es responsable de gran parte del descontento de la población.

 Por otro lado, en estas elecciones legislativas planea la amenaza de Donald Trump sus partidarios más acérrimos. El expresidente, que ha sugerido que anunciará el 15 de noviembre si presentará su candidatura para las presidenciales de 2024, ha tenido un papel activo en la campaña republicana y ha utilizado las midterm como un termómetro para medir su popularidad después de perder las elecciones en 2020. Además del control de la Cámara de Representantes y del Senado, este martes se eligen también a 36 gobernadores. En esta votación se decide el futuro de las políticas de los estados sobre temas como el sistema electoral, los impuestos y el aborto.

En algunos de los estados se libran las batallas electorales que pueden cambiar el rumbo del país. Estas son las carreras más importantes de las midterm de este martes.

Senado

Una de las votaciones con más expectación es la de Florida, que enfrenta al demócrata John Fetterman contra el republicano Mehmet Oz, cuya campaña ha sido respaldada por Trump. Fetterman empezó liderando las encuestas a pesar de que estuvo alejado un tiempo de los focos tras sufrir un ictus. La imagen del demócrata, con una altura imponente y que viste casi siempre con sudadera, contrasta con la estrella de televisión Mehmet Oz, uno de los personajes más conocidos del Partido Republicano. La campaña de Oz, que ha recibido el apoyo económico del líder republicano Mitch McConnell, ha estado marcada por el bombardeo de anuncios y por poner en duda las capacidades de Fetterman para ocupar el cargo después de sus problemas de salud. Las últimas encuestas seguían dando al demócrata el asiento en el Senado, aunque la diferencia entre los dos candidatos se ha reducido considerablemente.

Georgia es otro de los estados indecisos y uno de los más decisivos. Ya lo fue en 2020, en presidenciales y en las elecciones ese mismo año en las que los demócratas consiguieron controlar el Senado. En este caso, el demócrata Raphael Warnock se disputa el asiento con el republicano Herschel Walker, también apoyado por Donald Trump. El demócrata es senador júnior en Georgia desde 2021 —fue el primer senador afroamericano en este estado— y en estas elecciones espera afianzar su mandato y ayudar a mantener el control de su partido en la Cámara Alta. La campaña de este estado ha sido una de las más polémicas porque Walker reveló que tiene más hijos de los que había reconocido tener y, a pocas semanas de las elecciones, una exnovia del republicano afirmó que la ayudó a pagar su aborto en 2009 y que la presionó para que se realizara otro tiempo después. Walker, un opositor de la ley del aborto, ha negado las acusaciones.

En las presidenciales de 2020, Joe Biden obtuvo el apoyo de Arizona, pero por muy poco. En este estado, el senador demócrata Mark Kelly está listo para hacer frente al republicano, Blake Masters, otra de las figuras a la que le ha perseguido la polémica durante la campaña. El republicano, después de la contienda de 2020, apoyó las afirmaciones de Trump sobre el fraude electoral en esas elecciones presidenciales de ese año.

Por último, el estado de Nevada se considera una de las mayores oportunidades para que el Partido Republicano se haga con el control del Senado. El republicano Adam Laxalt se enfrenta a Catalina Cortez Masto, la primera senadora latina del estado. Al igual que Blake Masters en Arizona, Laxalt también se hizo eco de las afirmaciones del expresidente sobre el fraude electoral. Las últimas encuestas dan un margen muy estrecho entre los dos candidatos.

Cámara de Representantes

Los republicanos necesitan muy poco para conquistar la Cámara de Representantes. Las encuestas, más allá de sorpresas, dan a los demócratas exiguas oportunidades para mantener su ventaja de 220-212 en la Cámara Baja, mucho menos conseguir ampliarla.

El Partido Republicano parte con una ventaja y con una lección que aprendió en 2020. Casi todos los distritos que cambiaron de partido en esas elecciones fueron elegidos candidatos negros o mujeres. Los republicanos han tomado nota de estos aires de cambio y han favorecido una campaña republicana con un número mayor de candidatos diversos. La mujer negra de procedencia asiática Jennifer Ruth-Green, del distrito 1 de Indiana, Lori Chavez-DeRemer del distrito 5 de Oregón y Mayra Flores, del distrito 34 de Texas son algunas de las apuestas del partido.

A los distritos más reñidos se suma el 8 de Colorado, que está considerado como un indicador para interpretar cómo puede evolucionar la contienda electoral. Otros distritos considerados como decisivos son el 7 de Virginia, en el que la demócrata Abigail Spanberger se enfrentará a Yesli Vega, y el 1 de Alaska, donde la excandidata a la presidencia, Sarah Palinbusca conquistar al electorado frente a la demócrata Mary Peltolta.

Los puntos calientes para los gobernadores

Florida es uno de los puntos calientes de las legislativas. El gobernador Ron DeSantis y el senador Marco Rubio, ambos republicanos, tienen las encuestas a su favor y todo indica a que se mantendrán en el poder. Sin embargo, el foco está en el condado de Miami-Dade, que cuenta con la mayoría hispana más importante del estado. Hace 35 años que la población de este lugar no vota por un presidente republicano —la última fue en 1988— y desde 2002 no apoyan a un gobernador del mismo partido. Una victoria republicana en Miami-Dade supondría una victoria aplastante para la formación y también podría ser el impulso para una posible campaña presidencial de Ron DeSantis, que se convertiría en el competidor de Donald Trump en la carrera por la candidatura republicana.

Otra de las sorpresas que pueden depararnos estas elecciones es el resultado de la contienda para el puesto de gobernador de Nueva York. A pesar de que la tradición política del estado no ha estado teñida de rojo, la candidata demócrata Kathy Hochul ha sido criticada por no saber responder a los votantes que están preocupados por el aumento de la criminalidad. Como respuesta, algunos le están mostrando su apoyo al republicano Lee Zeldin.

Los frentes tradicionales como Míchigan, Nevada y Wisconsin siguen abiertos, y otros como Arizona y Pensilvania son de los más decisivos. Sin embargo, en estas elecciones, el mapa se ha expandido y Oregón, Nuevo México y Oklahoma se suman a la lista de estos que están en el punto de mira.

Las midterm no acaban aquí

Votar en las elecciones de medio mandato de Estados Unidos no es cosa de coger una papeleta, meterla en un sobre y entregarla en la urna. En el peor de los casos, en España lo máximo que hay que votar al mismo tiempo suele ser elecciones europeas, locales y regionales, quizás algún año coincidan con las nacionales, Congreso y Senado. Como mucho, cinco papeletas. En las elecciones midterm no solo se elige la mayoría en la Cámara de Representantes y el Senado, también concejales, tesoreros municipales, jueces locales y estatales y un sinnúmero de referéndums.

Un complicado proceso que cuenta en primera persona en un hilo de Twitter Diego E. Barros, español residente en Illinois que vota este año por primera vez. «La ‘papeleta’ de este año tiene 22 páginas», explica. «En USA se vota CASI todo, desde el presidente a los concejales y tesoreros municipales, pasando por jueces a senadores y congresistas federales y estatales», continúa, mientras las fotografías de las diferentes elecciones se suceden una tras otra.

2 páginas con varias preguntas en cada una de ellas: «No solo escogemos personas, sino que se someten a referendos cosas para su aprobación», este año en Illinois enmiendas como que se garantice el derecho a sindicarse en la constitución del Estado o reabrir los centros de apoyo y tratamiento psiquiátrico con presupuesto público de la ciudad. En otros estados, los referéndums varían; en las elecciones presidenciales del año pasado, en varios estados (California, Massachusetts y Nevada) se votó sobre la legalización de la marihuana, mientras que otros decidieron mantener la pena de muerte (California y Nebraska).

Con semejante papeleta (que luego se digitaliza y se introduce en un lector), añadiendo la posibilidad de ejercer el voto por adelantado, ya sea presencialmente (como el propio Barros) o por correo dependiendo del estado, algunos expertos están ya advirtiendo de que habría que hablar más de «semana electoral» en lugar de la habitual «noche electoral».

«Cuando se trata de conocer los resultados, debemos dejar de hablar sobre el día de las elecciones y pensar en cambio en la semana de las elecciones», sostiene Nathan Gonzales, autor de una conocida newsletter de análisis Inside Elections. La advertencia viene especialmente al tiempo después de la tensión de los casi cuatro días que se tardaron en conocer oficialmente y de manera unívoca los resultados de las elecciones presidenciales de 2020, y en un contexto de fuerte polarización política donde, tras el asalto al Capitolio del 5 de enero de 2021, no es posible descartar estallidos de violencia o, al menos, protestas por un presunto fraude de las elecciones.

Colonización de puestos menores

«A favor de referéndums, pero no creo necesario ni bueno escoger jueces, tesoreros y otros cargos menores, algunos sin rival. Repito, 22 páginas [de papeleta]. La inmensa mayoría no sabe/mos a quién vota, con excepción de senadores, gobernador, alcalde o presidente», concluye Barros sobre su experiencia en esta votación. Y son este tipo de puestos donde los republicanos también han ejercido su campaña, más allá de las carreras clave en el Senado o la Cámara de Representantes.

Por ejemplo, «negacionistas electorales» del resultado de las elecciones presidenciales de 2020, es decir, que sostienen que fue Trump quien en realidad se hizo con la victoria, se presentan no solo a 19 cargos de gobernador, sino también 10 de fiscal general y 12 de secretarios de Estado, el puesto responsable de supervisar los procesos electorales en cada circunscripción. El cómputo total de candidatos que han expresado opiniones negacionistas, si sumamos las carreras parlamentarias federales y estatales, es de 345. Todos ellos republicanos.

Es decir, en la democracia directa estadounidense, donde es prácticamente imposible conocer todos los detalles de las 22 páginas de papeleta, hay puestos intermedios, pero también claves, desde tesoreros a incluso jueces, que se eligen políticamente y que, en muchos casos —como la lucha contra el aborto, por ejemplo, o la supresión del voto en determinadas regiones—, pueden marcar el futuro del país.