CABELLO

Diosdado acusa a Estados Unidos y Reino Unido de «provocar» en el conflicto del Esequibo

El primer vicepresidente del PSUV alega interferencia extranjera en la disputa territorial, mientras la tensión entre Venezuela y Guyana se intensifica.

«Lo que ocurre con Guyana en este momento está el eje imperial, con EEUU detrás, detrás no, al frente, con el Reino Unido, con Europa ahí cazando, a ver qué daño le hacen a Venezuela,» acusó Diosdado Cabello, primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), atribuyendo a Estados Unidos y Reino Unido un papel provocador en la persistente disputa territorial del Esequibo.

Durante su programa «Con el mazo dando,» Cabello no se contuvo en sus críticas, alegando que estas naciones están “repartiéndose” los recursos naturales del Esequibo, un vasto territorio que Venezuela ha reclamado históricamente como propio. Según Cabello, la concesión de bloques petroleros en aguas disputadas por parte de Guyana es un intento de provocación respaldado por potencias extranjeras.

“Ahora ellos llegan y saltan la cerca y van a entregar concesiones para provocarnos a nosotros, porque son fanáticos de la guerra,” dijo Cabello, retratando a estas naciones como instigadores ansiosos de conflictos. También expresó su desdén hacia los venezolanos que restan importancia al conflicto del Esequibo, reafirmando el compromiso de Venezuela con el Acuerdo de Ginebra.

La tensión ha ido en aumento, con el gobierno de Nicolás Maduro respondiendo a los intentos de Guyana de licitar bloques petroleros en las aguas en disputa. El régimen ha dicho que tomará las medidas necesarias para defender el territorio, lo que ha sido recibido por Guyana como una amenaza, llevando el conflicto ante la Asamblea Nacional de las Naciones Unidas.

“Van a destruir ese territorio hasta que le chupen la última gota de petróleo como un vampiro,” advirtió Cabello a Guyana, pintando un retrato sombrío de las supuestas intenciones de Estados Unidos en la región.

En un intento de mitigar la creciente hostilidad, el presidente Nicolás Maduro ha extendido una rama de olivo, proponiendo una reunión de alto nivel con su homólogo guyanés, Irfaan Alí. Maduro enfatiza la diplomacia y el diálogo como herramientas esenciales para resolver este conflicto prolongado, una situación que se ha visto complicada por la supuesta interferencia extranjera.

Con la sombra del Esequibo oscureciendo las relaciones regionales, las acusaciones de Cabello ponen de manifiesto la complejidad multifacética de un conflicto enraizado en la historia, la geopolítica y los recursos naturales codiciados. La resolución pacífica se convierte en una aspiración cada vez más esquiva en medio de una cacofonía de reclamaciones territoriales, intereses internacionales y diplomacia tensa.