JESUS MENDOZA

Estudiantes de la UCV exigen transparencia y acceso en la jornada de Registro Electoral

Un llamado al Consejo Nacional Electoral para la reubicación de puntos de inscripción electoral se eleva desde la Universidad Central de Venezuela.

Estudiantes de la Universidad Central de Venezuela (UCV) alzaron sus voces este miércoles, desafiando la opacidad y los obstáculos en el camino hacia una participación electoral inclusiva y justa en el país. Un escenario teñido de desinformación y accesibilidad limitada ha marcado la jornada de inscripción y actualización del Registro Electoral, impulsando a estos jóvenes a exigir cambios concretos.

Jesús Mendoza, presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV (FCU-UCV), articuló la frustración y la demanda de transparencia. “En esta semana y media que ha iniciado esta jornada, hemos tenido que convertirnos, al parecer, en detectives para conseguir los puntos de inscripción,” expresó Mendoza, un eco de la creciente inquietud entre la población estudiantil.

La ubicación de los puntos de inscripción ha sido una piedra angular de la controversia. Situados en “zonas rojas”, asociadas al partido de gobierno, estos puntos se han convertido en símbolos de la inclinación política y los desafíos que enfrenta el proceso electoral. Mendoza y sus colegas no solo piden un cambio, sino que también exigen respeto y la aplicación del artículo 33 de la Ley Orgánica Procesos Electorales, esgrimiendo la Constitución como escudo y espada en su lucha por la justicia.

“Hemos recibido denuncias que los puntos itinerantes están en sitios donde lamentablemente hay una inclinación política en pro al partido de Gobierno,” reveló Mendoza, subrayando la urgencia de una intervención y una revisión del sistema actual.

La propuesta de los estudiantes es clara: reubicación de los puntos de inscripción en las plazas Bolívar de los municipios, publicación oportuna de las direcciones de estos puntos y una extensión de la jornada hasta la primera semana de diciembre. En este escenario de tensión política, estos jóvenes se erigen como los portadores de un mensaje que resuena con fuerza: la transparencia y la equidad no son negociables.