GERARDO

¿Alguien se acuerda de la libertad de prensa? Gobernador de Trujillo amenaza a periodista

Gerardo Márquez, gobernador de Trujillo, hostiga a periodista Andrés Briceño, marcando un patrón de agresiones contra la prensa.

El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) denunció una grave situación de hostigamiento en el estado Trujillo donde el gobernador Gerardo Márquez ha lanzado una amenaza directa contra el periodista y director de la emisora Palpitar, Andrés Briceño.

La tensión entre el gobierno y la prensa se agudiza con este nuevo episodio, que ha sido calificado como una declaración de guerra abierta contra la libertad de prensa.

Según el SNTP, Briceño recibió una llamada del gobernador Márquez, aproximadamente a las 6:30 pm, donde este último reaccionó de manera agresiva por una nota periodística sobre el colapso de una estructura decorativa en Valera.

Márquez no solo atacó verbalmente a Briceño, sino que también le advirtió: «A partir de ahora tienes la guerra declarada conmigo. Anda a dónde te dé la gana. Ahora vas a saber quién coño soy yo, con las malas». Este incidente no es aislado, ya que en enero, el gobernador ya había hostigado al periodista en su programa radial.

El contexto de la libertad de prensa en Venezuela se complica con este tipo de acciones. No solo Briceño ha sido víctima de ataques; la emisora Palpitar también ha sufrido agresiones físicas, como un ataque con piedras y bombas molotov. La impunidad de estos actos, sumada a la actitud beligerante del gobernador Márquez, pone en evidencia un patrón de intimidación y violencia contra los profesionales de la comunicación.

Este caso se suma a otros actos de amedrentamiento del gobernador hacia la prensa y opositores políticos.

En agosto, Márquez incitó a la violencia contra María Corina Machado, candidata a las primarias, a quien amenazó con ser sacada «a coñazos» si visitaba el estado. Estos incidentes reflejan un ambiente cada vez más hostil para la prensa y la oposición en Venezuela, donde la libertad de expresión y la seguridad de los periodistas están en riesgo constante.