Por WILLIAMS DÁVILA
La legítima AN instaló la Comisión Mixta en Defensa del Esequibo y la Fachada Atlántica. Ya tenemos tres años cumpliendo un rol venezolanista, que quedó plasmado en el libro blanco que editamos el 20 de diciembre del año pasado.
Es un libro de 750 páginas editado en inglés y en español, que se le hizo llegar a los magistrados de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), a su secretario y a la biblioteca de la CIJ.
Dijimos en la instalación de la Comisión que el régimen va a recibir una “goleada” en el escenario diplomático si continúa manejando el tema de la CIJ como lo está haciendo hasta ahora.
No importaría si la derrota fuera una vez más de la fracasada diplomacia de paz, que es el título que le pusieron a la política internacional del régimen; sobre todo para defender nuestra integridad territorial. Lo grave es que un fracaso nos llevaría a perder el Esequibo y también fronteras y salida al Atlántico.
Perderíamos nuestra capacidad de ser un país con salida al Atlántico para convertirnos en un país caribeño. Eso nos quitaría grandeza y traicionaría el pensamiento de Bolívar.
Lo cierto es que tal como el régimen está manejando esto, lo que uno ve en el horizonte es una goleada. Creo que ellos no han tomado conciencia de que este es un caso que ya está en la Corte Internacional de Justicia.
Maduro ideologiza y politiza el tema. No comprende que es política de Estado, ya que es un asunto de “importancia capital” para la nación.
El abogado que tiene Maduro fue el abogado que atendió el caso de Chile y Bolivia. Forma parte del grupo de (Baltasar) Garzón, que es el abogado de (Álex) Saab. Es ese equipo ideologizado que le hizo creer a Evo Morales que iba a ganar el caso.
La AN seguirá cumpliendo, con hechos, su deber venezolanista y patriótico de defender un territorio que es de Venezuela.
Es imprescindible que la Fuerza Armada se pronuncie en tan importante asunto, que toca intereses de soberanía nacional además de ser punto estratégico por su salida al mar.
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana tiene de alguna manera que estar preocupada, pues tiene inculcado el servilismo y la obediencia retrógrada. El régimen está desesperado. Sabe que no manejó bien este asunto y que tal como lo están haciendo podemos enfrentar un estrepitoso revés.
La comisión presentó un Plan de trabajo y de actividades que incluye a diversos sectores de la vida nacional e internacional, con la clara intención de promover los derechos sobre el Esequibo, así como la presentación del “Libro Blanco” en diferentes foros internacionales en el que estarán involucrados representantes del Gobierno Interino en diversas latitudes del mundo.
Hemos contado con excelentes asesores, entre los cuales se hallan Gerson Revanales, Carlos Ayala, Roman J. Duque, Víctor Rodríguez Cedeño, José Betancourt, Carlos Luna, Manuel Donis Ríos, quienes son expertos en la materia.
Vamos a sacar un Manual sobre el procedimiento de la CIJ, cuyo autor es Víctor Rodríguez, conocedor a fondo del tema.
La comisión está integrada por los parlamentarios: Julio Borges, Sergio Vergara, Edgar Zambrano, Olivia Lozano, Carmen Mulino, Luis Florido, Fátima Soarez y quien suscribe.
Nos preocupa el destino de nuestra integridad territorial. El régimen es tóxico y esa toxicidad la exporta y eso nos crea un ambiente negativo.
Maduro le habla a sus militares y les hace creer que con un discurso chauvinista, antiimperialista y retórico conquistará aliados en el campo internacional para su causa.
Creyeron que Guyana era todavía una colonia y no se dan cuenta de que es un país que hizo de la reclamación y de sus intereses expansionistas un “leit motiv” para unir el país en torno a una cuestión de Estado.
Cuando Guyana comenzó a dar concesiones petroleras en la zona en reclamación -violando el Acuerdo de Ginebra- Chávez le bajó presión a la reclamación para congraciarse con el CARICOM; para que lo apoyaran con una silla en el consejo de seguridad de la ONU. Fue un mensaje muy negativo que Guyana aprovechó.
Ahora el régimen está desesperado y pretende hacer lo que no hizo en 20 años llamando a las universidades etc. El punto es que el caso está en la CIJ y Maduro pidió una prórroga en la próxima audiencia, la cual se realizaría a finales de febrero de este año.
El Esequibo siempre fue visto como un tema muy importante, el más importante de la política exterior en los tiempos de la democracia.
Ahora el Esequibo se convierte en un tema de política interna. Es insoslayable el debate interno y así lo ha entendido el Presidente interino Juan Guaidó y la AN.
Los militares justifican su vigencia en la medida en que cumplen con su deber constitucional de defender la integridad territorial. Si no lo hacen, ¿para qué están? ¿Para repartir bolsas CLAPs? ¿Para perseguirnos a los diputados de la oposición? ¿Para que se corrompan en las redes de los negocios ilícitos en la frontera? ¿En los negocios vinculados a corrupción y tráfico sexual con menores? No pueden quedarse callados y cuando hablen no es para decir que mientras estén en el poder jamás permitirán que la oposición llegue al poder.
Señores miembros de los diferentes componentes de nuestras Fuerzas Armadas, despierten. Hagan verdad en la práctica la frase “El sol sale por el Esequibo”. Maduro los engaña. Desesperado y nervioso como está por su irresponsabilidad histórica, no les está diciendo la verdad. Jamás se las ha dicho.
El silencio de ustedes los hará cómplices –históricamente- de lo que suceda en la CIJ.
@williamsdavila