Foto cortesía de: El Universal

Ingeniera venezolana crea software para pantallas de Apple

La ingeniera en Sistemas, María Antonieta Tovar, egresada de la Universidad Metropolitana (Unimet), creó un sistema de monitoreo de estadísticas de vuelo para Creprochoca/Avensa, cuando hizo su tesis de grado para esa compañía.

Actualmente, es gerente de Ingeniería en Softwares para Monitores y Pantallas Apple. Sus inicios se dieron al momento de emigrar en agosto 1986 con el objetivo de estudiar una maestría y doctorado en Ingeniería bioinformática. Antes de cumplir su meta en llegar al gigante tecnológico, María Antonieta se desempeñó en:

Universidad de Stanford. Fue su primer trabajo como asistente de investigación al graduarse del postgrado que realizó en esa universidad.

Silicon Graphics. También conocida como SGI, fabricantes de hardware y software de computadoras, donde se desempeñó como fabricante de terminales gráficos.

NVIDIA Corporation. Multinacional especializada en el desarrollo de unidades de procesamiento gráfico y tecnologías de circuitos integrados para estaciones de trabajo, computadoras personales y dispositivos móviles.

ATI. Empresa de hardware que diseñaba GPU y tarjetas gráficas. La adquirió AMD en 5006 pero mantuvo su marca hasta 2010.

Todas las empresas donde ha trabajado María Antonieta, se especializan en software de computación gráfica.

La ingeniera que trabaja actualmente en Apple, lo consiguió gracias a su red de compañeros de trabajo. »Somos un grupo de personas especializadas en hardware y software para las tarjetas gráficas (GPU) y para sistemas y trabajamos muy bien como equipo”, comentó.

María Antonieta, supo canalizar sus oportunidades, reflejando que se siente afortunada de haber cumplido una de sus metas más grandes, debido a su fanatismo por las computadoras Mac. Por lo cual, se ve acabando su carrera en Apple. Y agradece »el privilegio de trabajar con este equipo, siendo una gran oportunidad para aprender nuevas tecnologías y para trabajar en un ambiente totalmente global».

Foto Cortesía: EL UNIVERSAL